La baja en la membresía se debe al haber utilizado a la Asociación como laboratorio de pruebas de un Programa que no llega a los jóvenes; tampoco basta con el esfuerzo de los dirigentes en los grupos. "El análisis de esto es que las crisis políticas internas afectaron la membresía, pero que no afectaron a los beneficiarios, ya que en general ellos no se enteran de estas cosas".
Estudiar metafísica es una cosa, pero el tratamiento es otra distinta. Las reglas en un caso no se pueden aplicar al otro, si se quiere alcanzar el éxito. La gente suele confundir las dos cosas y, por lo tanto, fracasan a la hora de la demostración.
Cuando estudias -leyendo un libro metafísico, escuchando una conferencia o pensando en la Verdad que conoces- debes tener la mente abierta, ser sabiamente crítico, no dar nada por sentado. Debes sopesar y considerar, y ser tan analítico como te plazca. No debes aceptar la palabra de nadie, sino probar todas las cosas, aferrándote firmemente a lo que se justifica mediante la demostración. "Por sus frutos los conoceréis" - Mateo 7: 20.
Cuando aplicas un tratamiento, el método opuesto es el correcto. Debes ser dogmático, insistente, presuntuoso y mentalmente cerrado a todo lo que no sea la Verdad sobre el problema. Sanas al conocer la Verdad sobre la condición, y al negarte tranquilamente a reconocer la realidad del error ni por un momento. De ninguna manera debes ser tolerante con el error.
No analices la condición que deseas curar; con eso no harías otra cosa que halagarla con tu atención. No pierdas tiempo considerando tus dudas. Piensa: "Dios en mi interior es más fuerte que todas mis dudas juntas, así que no desperdiciaré mi tiempo en ellas. La Verdad es cierta en todas partes y en todo momento. La Verdad es cierta en este aparente problema; y ése es el fin de la cuestión".
Quizás sea hora que el hermano Rodrigo Gonzalez Cao haga un paso al costado, ya que desde su asunción en el puesto no hizo nada más que sostener un Programa Educativo “Enlatado”, que a la hora de utilizarse no sirve para nada.
Estudiar metafísica es una cosa, pero el tratamiento es otra distinta. Las reglas en un caso no se pueden aplicar al otro, si se quiere alcanzar el éxito. La gente suele confundir las dos cosas y, por lo tanto, fracasan a la hora de la demostración.
Cuando estudias -leyendo un libro metafísico, escuchando una conferencia o pensando en la Verdad que conoces- debes tener la mente abierta, ser sabiamente crítico, no dar nada por sentado. Debes sopesar y considerar, y ser tan analítico como te plazca. No debes aceptar la palabra de nadie, sino probar todas las cosas, aferrándote firmemente a lo que se justifica mediante la demostración. "Por sus frutos los conoceréis" - Mateo 7: 20.
Cuando aplicas un tratamiento, el método opuesto es el correcto. Debes ser dogmático, insistente, presuntuoso y mentalmente cerrado a todo lo que no sea la Verdad sobre el problema. Sanas al conocer la Verdad sobre la condición, y al negarte tranquilamente a reconocer la realidad del error ni por un momento. De ninguna manera debes ser tolerante con el error.
No analices la condición que deseas curar; con eso no harías otra cosa que halagarla con tu atención. No pierdas tiempo considerando tus dudas. Piensa: "Dios en mi interior es más fuerte que todas mis dudas juntas, así que no desperdiciaré mi tiempo en ellas. La Verdad es cierta en todas partes y en todo momento. La Verdad es cierta en este aparente problema; y ése es el fin de la cuestión".
Quizás sea hora que el hermano Rodrigo Gonzalez Cao haga un paso al costado, ya que desde su asunción en el puesto no hizo nada más que sostener un Programa Educativo “Enlatado”, que a la hora de utilizarse no sirve para nada.
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