Despelotes bicentenarios

A juzgar por la historia Argentina, 1810 empezó tranquilo en Buenos Ayres. Baltazar Hidalgo de Cisneros encabezaba el virreinato desde julio y dirigía el primer “diario de Yrigoyen” de nuestra historia, La Gazeta de Gobierno, sostenido en dos pilares: los fondos públicos y la única imprenta de la aldea estatal e instalada en la Casa de los Niños Expósitos. Todo positivo.

Si existiese algún paralelo diriamos que desde 1996 todo empezó tranquilo en Scouts de Argentina con un Consejo Nacional y una Dirección Ejecutiva, sostenida con los fondos del pago de la afiliación y la única herramienta de ingresos de información a la misma aldea Miscelaneas por un lado y la pauperrima pagina oficial. Sin hablar de la pésima exposición del movimiento scout desde un programa de radio. Como si ésta fuese una materia pendiente de los que la conducen y no de Scouts de Argentina.

Las actas del Cabildo ilustran de un enero bastante caluroso e intrascendente. Algunas ventas de negros por aquí, reclamos testamentarios de unas viudas por allá y un cacique que se presentó a retirar a su hijo, adoptado por el Cabildo, constituían problemas menores. Pero había un lío bárbaro.

Hoy todos los grupos, o su gran mayoría se van del merecido campamento Anual, sin pensar en los pormenores de lo que depara la agenda 2010 de Scouts de Argentina dónde el bicentenario pasa por vender desde el souvenir hasta la insignia del poncho para seguir recaudando desde los bolsillos de siempre.

El 3 de enero, Cisneros mandó por escrito su primer parte del año a España, describiendo un preocupante estado de “fermentación” y el desparramo de “especies sediciosas contra el gobierno de que públicamente se habla en los cafés y tertulias”, por lo cual decidió “establecer un juzgado de vigilancia” dedicado a “cortar aquel pernicioso cáncer”. Por los conspirativos chismes terminó siendo acusado Francisco Xavier Argerich, dueño de una conocida escuela donde estudiaron, entre otros, el pequeño Juan Manuel de Rosas. Argerich se “fugó antes que se le averiguase y persiguiese”.

En este 2009, que se fue, nuestro presidente Marcelo “Elgordo” Rivas junto al Director Ejecutivo Gerardo “Muñeco” Matteyko enviaron un miedoso comunicado a todos los asociados descalificando a los Blogs. Todo a pedido del bufón de Juan Carlos “Tengouncurrito” López; principal perjudicado, según él, por improperios o mentiras hacia su persona. Pero se olvidaron de lo principal: El negocio Scout.

Mientras escribía esta carta, Cisneros le ordenaba al general Nieto que se fuera con mil hombres para desbaratar un foco revolucionario en La Paz, comandado por Pedro Domingo Murillo, quien terminó ahorcado junto a sus principales seguidores. Del otro lado del Atántico, Napoleón Bonaparte copó la Corte de Sevilla, consolidó en el trono español a su hermano José y se divorció de Josefina porque la señora estaba menopáusica y no podía darle un heredero.
Sin darse cuenta de nada de esto, la vieja Gazeta salió por última vez el 9 de enero, mientras Cisneros autorizaba a uno de sus más brillantes funcionarios, Manuel Belgrano, a que editara El Correo de Comercio, con el mismo financiamiento y la misma imprenta. Acaso un poco delarruizado, Cisneros no percibió que lo distinto eran las intenciones.

En las primeras ediciones de El Correo, el castizo Belgrano dedicó largas parrafadas a la difusión de las que serían tres ideas-fuerza de quienes, en mayo, formarían la Primera Junta: unidad territorial y política para desarrollar una nación; estadísticas serias, para conocer las bases en que debía sentarse; y libertad de prensa, para evitar que a los gobernantes se les fuera la mano.

Desde el consejo Nacional no pudieron enviar tanta gente como el General Nieto pero enviaron espías a distintos lugares para vender o mejor dicho apaciguar las aguas zonales. Al principio fueron Liliana “tengounproblema” Torres junto a su “inseparable” amiga Estela “Gerarda” Sichero (la primera representaba al Consejo y la segunda al ejecutivo) a ver que pasaba en la zona 2 Flores. Como esto fue denunciado por este Blog no tuvieron más remedio que renunciar y desaparecer. Y perseguir por otro lados a todo aquel que les estorbaba.

El escenario se veía plasmado por más desapariciones no hubo mejor idea que organizar un encuentro de Directores de Zona en la localidad de Ezeiza con un costo alto que impactaban en los grupos, como siempre. Ni que hablar de las ventas de los productos 50% más caro que en cualquier kioskito. Pero el detalle, al igual que la Asamblea, el Kiosko fue atendido por su único dueño o mejor dicho su único y exclusivo representante y no sabemos de quién o quienes. Sí otra vez López, y van...

De Belgrano a Mattei (a este Gerardo “Muñeco” Matteiko, emblema de las malas estadísticas, la idea fija de recaudación como método de salvataje económico y el copamiento de cualquier negocio de López como última obsesión 2009) han pasado doscientos años exactos y un millón de despelotes, incluido el que hoy nos ocupa y que, por despotismo, tontería o flojera, se nos pretende embellecer.

Enrique Muñoz
Editor
PD: "extraido de Pagina12"